También ella tenía el pelo mojado, pero esa vez no le brillaban los ojos. Llevaba una bolsa grande de plástico, porque le había dicho a Malcolm que debía recoger un vestido, de modo que apenas le quedaban unos pocos minutos para estar conmigo. Me preguntó por qué sabía yo que aquel encuentro era el último. "Pues por las películas", le dije, "cuando llueve tanto es que alguien se va a ir para siempre".
-El invierno en Lisboa, Antonio Muñoz Molina.
Si en un día como hoy, en alguna parte hay una pareja de enamorados diciéndose adiós, yo me los imagino como en Casablanca: con una despedida agridulce, sin paraguas y en blanco y negro.
los adioses son un asco
ResponderEliminaraaiii de tierno !
ResponderEliminarun adios siempre es triste, aunque puede ser bonico con la nieve y esas cosillas :)
ResponderEliminary con la esperanza de mantener el recuerdo o mejor aún de volverse a ver ;D
ResponderEliminarSin saber dónde terminar o empezar... Sí, los días como hoy son escenario de despedidas porque el cielo ya lagrimea adioses.
ResponderEliminarEspero que tú no digas adiós a tu blog de momento ;D
Besitos.
No se cuantas parejas se dirás adiós hoy, pero si que te aseguro que la lluvia se quedará corta en sus lágrimas :(
ResponderEliminarBesos tristes
pues espero que ese mito de la lluvia sea mentira..
ResponderEliminarOh, yo también me los imagino así, entre el frío.
ResponderEliminar:(
ResponderEliminaruna despedida fría :S
un beso
No me gustan las despedidas :'(
ResponderEliminarya quisiera yo que me hubiese dicho adiós de esta forma...al menos sería como en una película :(
ResponderEliminarEsa escena de despedida es tan romántica, que no puede ser definitiva...
ResponderEliminarY sobre todo preciosa. Como ya he dicho muchas veces: las despedidas son promesas de reencuentros.
ResponderEliminarmuá :)
que cosa tan bonita de blog.
ResponderEliminarHay una peli que me encanta de Campanella que va sobre eso, sobre las despedidas y la lluvia, era "El mismo amor, la misma lluvia" aunque con final feliz.
ResponderEliminarEn una semana estaría en lisboa, si no fuera porque se me gafó de nuevo.
ResponderEliminarVan seis las veces que intento ir, y siempre se me gafa
vaya mierda maaaas grande las despedidas!
ResponderEliminarQuizás hoy la lluvia te haga pensar en eso... pero tambien pueden sumarse los dias de sol... Creo que en esos dias, las despedidas deben sentirse mucho mas dolorosas...
ResponderEliminarBesos a tu alma !!!
ei!! me gusto mucho tu nuevo blog, me ayudo a conocerte un poquito mejor ;)
ResponderEliminarbesazos!!!
me gusta mucho!
ResponderEliminarte sigo...
http://hoyquierooserfeliz.blogspot.com/