La niña es sorprendente para ella. Es una maravilla. De toda su familia, ella y Kitty y Hugo y todos los otros niños y sus padres, de todos ellos, sólo queda esta niña. Es la única. Todos han quedado reducidos a esta chica de pelo oscuro sentada en la arena, que no tiene ni idea de que sus manos y sus ojos y el gesto de la cabeza y la caída de su pelo pertenecen a la madre de Esme. Sólo somos recipientes a través de los que pasan las identidades, decide la anciana. Somos rasgos prestados, gestos, hábitos, que luego transmitimos a otra persona. Nada es nuestro. Venimos a este mundo como anagramas de nuestros antecesores.
-La extraña desaparición de Esme Lennox, de Maggie O'Farrel
En cierta forma, eso me parece muy triste :/
ResponderEliminarUn muáh :]
mmm..interesante eso de que solo somos recipientes!;)
ResponderEliminarmuah
quiero pensar que somos algo más y todos aportamos algo nuevo, ya sabes, mejorando la especie jaja
ResponderEliminarbesitos
Si contáramos todos los rasgos que nos han prestado (tú.. tú tienes la nariz de tu tía, y las orejas de tu abuelo, y el cuerpo de guitarra, xD), no nos quedarían ni los huesos.
ResponderEliminarCreo que tenemos una composición creada con el paso de las generaciones; sin embargo, nuestra esencia, ésa es única, indescriptible, irrepetible. O, por lo menos, es lo que me gusta pensar a mí. Besos.
ResponderEliminarPero que lindo mujer, cada dia adoro mas tus Post. Besos.
ResponderEliminarMe ha encantado este fragmento ;) y es cierto somos seres pautados por otros, por los que antes que nosotros establecieron parametros gestuales, de estatura, de olor corporal. pero en lugar de ver lo negativo es como ser un collage y disfrutarlo...
ResponderEliminarprecioso
ResponderEliminartienes una cosita para ti en mi blog :)
ResponderEliminarY que razón tiene el texto... Kisses!
ResponderEliminarMe deja pensando esa afirmación...¿Será así?
ResponderEliminarMuac.
Por esa razón me niego a beber alcohol... para no tener algo que me haga parecer a mi padre y que arruinó mi vida...
ResponderEliminarEl texto esta muy bueno cielo... a algunas personas quizas les favorezca... pero sería bueno moldearnos asi como sucedan las cosas...
Besos a tu alma bella!!!
Muy cierto eso.. Un besito ♥
ResponderEliminarme encanto el blog y lo de la entrada
ResponderEliminarte sigo!
beso enorme
cierto, da que pensar...
ResponderEliminarBesitos guapa!
tienes muy buena info y un agradable blog.
ResponderEliminarsigue asi con todos tus proyectos......
saludos....
Oh cielos, que horrible, mi hija soy yo??? no por Dios.
ResponderEliminarBesos renovados
Wow.
ResponderEliminarMe ha encantado. Sobre todo eso de: sólo somos recipientes a través de los que pasan las identidades.
Claro, es algo que no podemos evitar, esto de la genética es demasiado fuerte, pero nunca iguales. Obvio. Es cierto eso del anagrama, siempre algo se nos invierte, pero al final, después de tantas mezclas logramos un resultado único.
ResponderEliminar¡Besitos!
Nada nos pertenece. Ni siquiera este cuerpo.
ResponderEliminarCreo que nos moldeamos segun la mirada del otro, me encanta tu blog, espero que me sigas como yo a vos & me dejaste pensando con ese texto.
ResponderEliminarMuak♥
Es lo que tiene la genetica, que va dejando secuelas.
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